Una de las condiciones necesarias para la búsqueda de la presencia viva en cristo, es estar el mayor tiempo en silencio, tanto de soliloquios, como de proyecciones dialogadas externas (La razón se asemeja a un proyector que emite una película en cada conversación). Lo que se persigue o se busca con el estar en silencio es poderse sintonizar con fuerzas invisibles, internas, espacios que se abren si estamos receptivos, nos podemos sincronizar con fuerzas constructivas y destructivas, es por eso que se hace necesario revisar constantemente nuestros razonamientos y emociones pues mucho daño se hace de forma inconsciente en nuestro diario vivir, por esto es necesario estar en constante auto- observación oración, estar preparados es indispensable para llevar a feliz término cualquier obra que emprendamos; así por ejemplo si, para construir una casa, primero se debe planear como hacerla, el tiempo a invertir en cada detalle, los materiales necesarios, las personas que se necesitan, todas las cosas son previstas para llevar a feliz termino su ejecución, si para una obra material tenemos en cuenta todos los detalles, cuanto más debe ser en una obra interna, espiritual, porque el silencio – oración es el laboratorio del alma, donde debemos trabajar asiduamente. (Ver Libro N°6 Trinosofía Magna, Introducción a la meditación).
A continuación pasos a seguir en la consecución de lo que se pretende, se quiere lograr o encontrar.
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